miércoles, 2 de diciembre de 2020

Hoy D. Manuel Ibáñez presentó su nuevo libro...

Esta mañana tuvimos entre nosotros a un antiguo profesor del instituto al que algunos de vosotros ya conocéis y al que otros conoceréis desde hoy. Él es Manuel Ibáñez Pastor, más conocido en el instituto y en el pueblo en general como Don Manolo. Es el principal patrocinador del Concurso Literario "Cañada Real" que organiza desde hace años el Dpto. de Socio-lingüístico en nuestro instituto.

Después de escribir su primera obra, Vivir el cáncer desde el optimismo, basada en su propia vivencia personal, hoy nos presenta su nueva obra La maravillosa historia de tres amigos Alvarinchi, MIkel y Helena con H.

El acto fue presentado por la profesora de Lengua, Azahara Fernández, además antigua alumna suya y al que le le dedicó unas entrañables palabras: 

"Quizá no pusiera demasiada atención cuando tenía 12 años en la demografía de África. ¿Qué me importaba eso a mí? Pensaba yo... Sin embargo, allí estaba Don Manolo para transmitirnos a toda la clase mucho más que contenidos, para transmitirnos entusiasmo, para transmitirnos valores.

No se nos ha olvidado la típica frase que nos repetía cada día "Cada cosa a su tiempo y un tiempo para cada cosa", con la que nos enseñó a tener paciencia. No sé nos ha olvidado tampoco su frase "O jugamos todos o rompemos la baraja", con la que nos enseñó la importancia del compañerismo. Y recordamos aquello de “Caminante no hay camino, se hace camino al andar", con la que nos enseñó que el trabajo, el tesón y el esfuerzo nos haría llegar lejos. Por todo eso, estoy segura de que con esta nueva obra que viene a presentar, aprenderemos mucho más de lo que dicen sus palabras."


       Con todas las medidas COVID-19, el acto se realizó en el patio ante un solo grupo de alumnos.     Previamente le habían realizado una entrevista en @radioquercus que podéis escuchar en este enlace

Para terminar, la  alumna de 1ºESO-A, Ángela Prieto, hizo una lectura de un pequeño fragmento de la obra.



Este es el fragmento...

Lo que más los gustaba era analizar y hablar sobre las personas mayores. Les parecía que eran torpes y que no sabían vivir. Ese era el motivo por el que siempre se morían.

Ellos, decían, que jamás morirían, serían unos superhéroes siempre y que cuando fueran mayores no vivirían como sus padres. Si acaso vivirían como sus abuelos, que ni tra-

bajaban tanto ni estaban todo el día cabreados. A los abuelos ellos los adoraban, eran sus referentes siempre.

Cuando querían ponderar algo más de lo debido, siempre decían: “...es que lo ha dicho mi abuelo”, a las abuelas no las tenían tanta admiración, aunque bien es verdad que las

querían mucho.

Cada día en su bosque, jugueteaban y se divertían de una forma muy dinámica y divertida. Los árboles para ellos eran soldados, guerreros y su máxima siempre era: somos felices cuando hacemos lo que queremos...



Las conversaciones en el bosque los ayudaban a formarse más cada día. Y allí fraguaban su dia de mañana. Su dicho más repetitivo era siempre: ..” esto será mejor el día que seamos mayores”. Ellos tenían muy claro que siempre vivirían los tres juntos, que se harían una casa para los tres y que jamás se casarían ni tendrían hijos...para ellos eso eran rollos de mayores y tonterías de los demás.

Mikel decía que sus padres no sabían vivir, siempre están trabajando, ganando dinero y comprando cada vez más cosas. Helena se reía de los suyos, pues sólo se preocupaban cuando alguno de ellos se ponía malos. Recordaba la que se lio en su casa cuando operaron a su abuelo; parecía que el mundo se acababa. Que si se iba a morir, que si de esa ya no salía.”¡ Es que son como unos inmaduros”!, decía Alvarinchi, “siempre están pensando en lo malo, y olvidan lo bien que se puede vivir sin tantas preocupaciones”. Nosotros sí sabemos vivir bien, sacamos todo lo mejor del día en cada momento. Una vez dicho ello comenzaron a subirse a los árboles y a corretear por el bosque hasta que oyeron la voz de una de sus madres.


D. Manolo hablando de su libro.

Además de hablarnos de su obra, nos habló de su vida, de su forma de afrontar la enfermedad...un gran ejemplo de Genialidades Sin Barreras.


Gracias Don Manolo por venir a nuestro centro que siempre será tu centro.